¿Serán los wearables el futuro?
Muchos de nosotros ya estamos familiarizados con el mundo de los wearables o por lo menos con su tipo más predominante, los relojes inteligentes o smartwatch. Si todavía no eres uno de ellos a continuación te vamos a explicar brevemente qué son y las posibles líneas futuras que pueden tener en nuestro día a día.
Un wearable es cualquier dispositivo electrónico que podemos llevar “puesto” encima. Esto incluye desde smartwatchs hasta las famosas gafas inteligentes de Google. Pasando por zapatillas que te indican por dónde tienes que ir a través de GPS, denominadas Sneakairs o pulseras que te permiten realizar transacciones financieras a través de terminales habilitados “contactless”, que se utilizarán por ejemplo para los Juegos Olímpicos de Río 2016.
En los próximos años el mercado de los wearables se incrementará notablemente. Según el estudio realizado por ConsumerLab de Ericcson en marzo de 2016 sobre Wearables e Internet of Things (IoT), la tendencia de los wearables será principalmente para controlar la salud y estado físico del usuario. El 74% de los encuestados creen que en 2020 se alcanzará el punto de inflexión de los dispositivos portables y el 33% de los encuestados creen que llegado este año estaremos en posesión de mínimo 5 wearables por persona, llegando a sustituir incluso a los smartphones. ¿Os veis llevando 5 wearables en lugar de vuestro móvil?
Un futuro incierto
El problema de los wearables es que no llega a enganchar a la mayoría de los usuarios, que a los 3 meses de su utilización se cansan y lo dejan olvidado en un cajón de su casa. Es por ello que el principal objetivo de estos dispositivos portables tiene que ser facilitar la vida a los usuarios para que realmente sea útil y necesario portar estos dispositivos.
Lo bueno de que la tecnología esté al alcance de todos es que toda persona puede tener una buena idea para desarrollar algo para ayudar a los demás. Por ejemplo, unos estudiantes de la universidad de Mercer han desarrollado un prototipo que podría salvar vidas a los corredores en la calle. Este wearable permite escuchar música a través de la estructura ósea del cráneo llegando hasta el oído interno, de esta manera los deportistas pueden seguir escuchando lo que hay a su alrededor.
¿Y tú? ¿Tienes alguna idea por la que merezca la pena apostar?
